Como debo de Orar?

Comunicación, la base de la Relación

Como ya hemos visto en el Blog anterior, para empezar a tener una relación con Dios, es necesario que primero reconozcamos quien es EL, quienes somos nosotros y que es lo que EL espera de nosotros. Toda relación sin comunicación deja de ser relación, por lo menos en su esencia, pues qué relación uno puede llevar con alguien de quien no sabe nada porque nunca hubo una comunicación directa con esa persona?


Imaginemos a un "Fan" de algún artista. Sabe toda clase de información de dicho artista como donde nació, que come, como duerme, que lee, si es casado(a) y toda su trayectoria, pero por más que sepa de esta persona toda esta información, si nunca ha tenido comunicación directa con ella, pues nunca va a poder decir que tiene una relación, por lo menos de amistad, con ese artista, y si no conoces de una manera más cercana a la persona por medio de una comunicación directa, pues no podrás decir que realmente la conoces.



Entonces, para poder tener una relación con Dios, lo primero que se debe de hacer es ORAR. Y que es Orar? Orar es simplemente la conversación que uno mantiene con Dios; véase que aquí estamos hablando de una conversación y no un monologo, pues muchos tienen por costumbre hablar, hablar y hablar y no le dan tiempo a Dios de poder responder.

Debo de manifestar que para muchos el mantener una conversación con Dios resulta algo complicado y ello se debe a lo siguientes factores:

  1. La costumbre de rezar (monólogos repetitivos) y/o el sentir que hablar con Dios es parte de un castigo (como lo vimos en el mensaje anterior);
  2. El desconocimiento de que Dios nos escucha y mejor aún que EL nos puede responder;
  3. Sentir o creer que uno esta "Loco" por hablar "solo";
  4. Falta de un oído y/o corazón dispuesto a oír la voz de Dios;
  5. Frustración ante el silencio "aparente" de Dios, es de decir, ante la falta de una respuesta rápida;
  6. La falta de paciencia para espera la respuesta de Dios; entre otros
Este ultimo punto esta ligado a los anteriores...


Confieso que en más de una oportunidad tuve alguno de estos factores, por no decir todos, que me imposibilitaban el orar con toda tranquilidad a Dios, y para todos los que no están acostumbrados a orar puede que resulte difícil el hacerlo, pero con la práctica verán que la conversación ha de salir por sí sola, ya que la oración es la llave que abre todas las puertas.

Debemos, como se dijo antes, de tomar la oración que Cristo nos enseño como un modelo, para llevar una conversación con Dios, en donde primero nos acerquemos a EL con reverencia, con humildad y (ante el consentimiento del pecado en nuestras vidas) con un corazón humillado y arrepentido; segundo, con un corazón agradecido por lo que EL nos da, nos dará o incluso por lo que EL no nos ha dado o no nos dará, pues Su voluntad es lo que se tiene que cumplir y no la nuestra y por último, entregarle nuestro corazón arrepentido, dándole nuestras cargas para que sea EL quien tome el control de nuestra vida.

Entonces... COMO DEBO ORAR?


La Biblia nos enseña lo siguiente:
    1. "Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá". (Mateo 7:7)
      Y es que si le pedimos, buscamos y llamamos a Dios, EL nos atenderá y nos dará lo que le pedimos. Dará lo que deseamos. Hallaremos lo que estamos buscando y abrirá las puertas que se nos han cerrado para poder lograr lo que deseamos lograr;

    2. "Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites". (Santiago 4:3)
      De este pasaje podemos aprender que no debemos de pedir para nuestro provecho propio pues Dios conoce nuestros corazones y EL quiere que lo que le pidamos lo hagamos para agradarle a EL y no para agradarnos a nosotros mismos (1ra Corintios 10:31);

    3. "Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público" (Mateo 6:6)
      Recordemos que Dios conoce nuestro corazón y que EL recompensará al corazón dispuesto a agradarlo a EL, como vimos en el punto anterior;

    4. "Deléitate asimismo en Jehová, y EL te concederá las peticiones de tu corazón. Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en EL; y EL hará. " (Salmos 37:4-5)
      Esto nos confirma los puntos antes señalados, y nos enseña que lo que le pidamos EL lo hará;

    5. "Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces" (Jeremías 33:3)
      Dios
      es claro aquí diciendo que EL es el quien puede respondernos ante nuestro clamor y que su respuesta será tal que nos asombraremos con su respuesta de AMOR, porque:

    6. "Todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre (en el nombre de Jesús), lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré" (Juan 14:13-14) y "Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido" (Juan 16:24)
      Jesús
      nos enseña que TODO lo que se le pida a Dios hay que pedirlo en el nombre de Su Hijo, para que Dios lo haga por nosotros. Por qué?

    7. "Porque hay un sólo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre" (1ra Timoteo 2:5)
      No le puedo pedir a nadie más que a Jesús que interceda por mi ante Dios, no existe ningún otro ser creado, vivo o muerto que pueda interceder por nosotros ante Dios y es que sólo existe el Padre (Dios), el Hijo (Jesús) y Espíritu Santo que pueden hacer cosas por nosotros cada que lo pedimos en oración.
    Y sólo se trata de Pedir???

    No, la oración sirve de mucho pues no solamente es para pedirle a Dios cosas sino para, con ella, buscarlo a EL y a Su Justicia (Mateo 6:33); evitar entrar en tentaciones (Lucas 22:40); para confesar nuestros pecados (1ra Juan 1:9), para pedir por otros y para buscar sanidad ante las enfermedades (Santiago 5:16); para dejar nuestras cargas (Mateo 11:28), para que EL este en medio de nosotros (Mateo 18:20); para conocerlo más a EL (Juan 17:3), para que por medio de nosotros otros conozca de Dios (Juan 17:20), entre otras tantas cosas que podemos hacer con la oración, pues la oración del justo puede mucho (Santiago 5:16), ya que "para los hombres las cosas que son imposibles, para Dios todo es posible". (Mateo 19:26)

    Sólo un último consejo, tratemos de no decirle tanto a Dios: "SEÑOR... Dame!!! Aprendamos a decirle a EL: "Señor.... Te doy" ... Te doy mi corazón. Te doy mi vida. Te doy mi tiempo. Te doy mi familia. Te doy mis estudios. Te doy mi relación. Te doy mi felicidad. Te doy mis cargas. Te doy mis tristezas. Te doy mis ofrendas y diezmo. Te doy mis metas. Te doy mi atención. Te doy mi AMOR....Te doy TODO de mi.

    Recuerden las palabras del Señor Jesús, que dijo: "Más bienaventurado es dar que recibir". (Hechos 20:35)



    Nos vemos en la siguiente nota....

    Dios te bendiga!!!
    El Brunicce.

    Y ahora.. Como llevo esa relación?

    Padre Nuestro ....(Oración Modelo)...

    Una vez que entendimos que tenemos un Padre Amoroso, que desea que le busquemos constantemente, y que lo más importante, cuando lo hallemos, es que sepamos que podemos confiar en EL, y debemos de tomar la decisión de comenzar a llevar una relación con EL.

    Y como llevo esa relación?

    Lamentablemente siempre, de una u otra manera, se nos ha enseñado erróneamente que Dios es un dios “castigador”, “prohibidor”, “duro”, “que ajusta pero no ahorca”, que solo escucha a los “Santos”, que si soy como soy: “yo nunca cambiare”; pues “no tengo perdón de Dios”, o que para confesar mis pecados tengo que usar a otra persona, para que esa otra persona me imponga un “castigo” de ir y decir un montón de rezos, claro dependiendo del color, peso, olor, densidad, diámetro y arrepentimiento de mis pecados, se me dará mas o menos rezos para poder absolver mis pecados... cosa mas fuera de la verdad de Dios y que procederemos a explicar....
    Dice la Palabra de Dios en Primera de Juan 1:9

    “Si confesamos nuestros pecados, EL es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.”

    Aquí habla de EL, quien??? Cristo, quien mas. No hay nadie sobre la tierra a quien yo le tenga que confesar mis pecados, pues el único que puede perdonarme de mis pecados es EL. Podemos confirmar esto leyendo el fragmento bíblico donde Jesús le dice a un paralítico que le perdona sus pecados en Mateo 9:1-8, en especial el versículo 6 que dice: "Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados..."

    Asimismo Primera de Timoteo 2:5 dice claramente que: “Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo
    hombre”

    Si amigos!!! EL perdona todos nuestros pecados y para eso debemos de estar: Primero, Consientes de que lo que hicimos es Pecado y segundo debemos de estar plenamente arrepentidos y pedirle como dice en 1 Juan 1:9 que nos perdone y limpie de toda maldad. Una vez que estamos seguros que haber sido perdonados por su Amor y Misericordia, sabremos que estamos llevando una buena relación con Dios.



    Oración: Conversación o Castigo?

    Como dijimos antes, tenemos en nuestro subconsciente desde hace mucho tiempo atrás que conversar con Dios es un castigo, y esto no es así, pues conversar con Dios es lo mas hermoso que le puede pasar a cualquier persona. Tener un tiempo en donde puedas estar realmente a solas con Dios y expresarle todo lo que tiene tu corazón como
    tus alegrías, tristezas, sueños, frustraciones, metas, fracasos, lo agradecido que estas por lo que te da, o lo que aun estas esperando de parte de EL

    Imaginemos ahora, que somos un niño o niña, y que nuestro papá o mamá se acerca a nosotros a conversar.... De pronto nos dice: Hijo(a) mío que es lo que mas quieres que yo haga por ti? A lo que nosotros respondemos: “Pin Pon es un muñeco de trapo y de cartón se lava la carita con agua y con jabón...” Me imagino la cara de sorprendido que debe de tener ese padre al ver que su pregunta no ha sido contestada y que lo único que recibió fue una canción que todos los niños conocen muy bien.

    Ahora, me imagino a Dios haciéndonos esta pregunta constantemente y nosotros respondiendo: “Padre nuestro que estas en los cielos, santificado sea tu nombre.... “ Imagínense ahora que estamos en un carro a toda velocidad, los frenos se han vaciado y no hay forma aparente de que nos salvemos de la muerte, salvo pedirle a Dios que lo haga... Cual es la reacción de aquella persona que no esta acostumbrada a tener una relación con Dios, como para pedirle que lo salve del tremendo accidente próximo a ocurrir? Pues, no me extrañaría que piense que lo mas cerca de salvarse es rezando un “Padre nuestro”, cosa que realmente no solucionara su problema, pues Dios se sabe ese rezo de memoria y no dice nada como
    ¡DIOS mío, Ayúdame por favor! Perdona mis pecados... Salvame!!!

    Y es que el “Padre Nuestro” más que un rezo repetitivo; es en realidad la Oración Modelo que Jesús nos dejo. Una oración preciosa que debemos saber que Jesús quizo que aprendamos a desarrollar, mas no a repetir. Veamos ahora en Mateo 6:5-9 lo que Jesús nos dice respecto a la oración:

    Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos. No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis. Vosotros, pues, oraréis así: “Padre nuestro que estás en los cielos...”


    Analicemos brevemente la Oración que Cristo nos enseño:

    Vemos en esta oración dos etapas claramente marcadas, la primera es en donde hablamos de EL y lo que EL significa para nosotros, la segunda, es en la que le decimos de nosotros, de nuestras alegrías, sueños, metas, lo agradecidos que estamos, así también como nuestras tristezas, frustraciones, fracasos, y lo que deseamos que EL haga en nosotros y nosotros deseamos hacer para EL.

    Cuando dice: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre

    Primero habla de que debemos de reconocer a quien va dirigido nuestra oración: a Nuestro Padre, a Dios, pues. EL es lo más grande que existe y que debe haber en nuestras vidas

    Luego dice:
    Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.”

    Aquí vemos que estamos reconociéndolo como el Rey de reyes, que Su voluntad es más importante que la nuestra y que sabemos que esta se expresa libremente en el cielo como en la tierra.

    Continua ahora la parte donde hablamos de nosotros: El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.”

    Aquí van nuestras necesidades, lo que nos falta para mejorar constantemente y ser mejores personas, tanto física, mental y espiritualmente. El pan es tanto un símbolo de alimentación física como espiritual.

    Debemos reconocer nuestros errores (pecados) como ya lo dijimos líneas arriba: “Y
    perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores.”

    Dios siempre nos perdona; nosotros por que no hemos de perdonar entonces? Aquí le decimos a Dios que nos perdone y que nos enseñe a perdonar.

    Por último, debemos pedirle que nos aleje del mal: Y no nos metas en tentación mas libranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén

    Cuan bueno, fiel y justo es Dios que EL nos tiene siempre bien protegidos. Dios es fiel con todos, pero es más bueno y fiel con los que le buscan y Aman, pues llevar una relación con Dios nos hace conocedores de Su voluntad y propósito para cada uno de nosotros (Romanos 8:28)

    Debemos pues, hacer nuestras propias oraciones y no repetir esta preciosa oración modelo que muchos han convertido en un rezo repetitivo. Un ejemplo de ello puede ser una simple oración como esta:

    "Dios mío y Señor mío, ahora he aprendido a reconocer que Tu voluntad es que yo tenga una relación contigo a base de un tiempo de conversación. Gracias te doy porque se que tu eres bueno conmigo y me has perdonado mis pecados. Ayúdame a ser una mejor persona cada día. En el nombre de tu hijo Jesucristo. Amen!

    Nos vemos en la siguiente nota....

    Dios te bendiga!!!

    El Brunicce